5 maneras de ahorrar en productos de limpieza

En el ir y venir del día a día es imposible no ensuciar el hogar o el lugar de trabajo sin pensarlo, y como producto de esto nos encontramos con una abultada cuenta en gastos en productos de limpieza al final del mes. Con estos simples tips va a ser muy simple poder rendir esos billetes que tanto nos cuestan conseguir con el sudor de la frente.

Precio sobre marca

Parecerá muy obvio pero cuando uno se encuentra en el supermercado los ojos tienden a ir a las marcas Colombianas o internacionales que reconocemos. Cuanto más básico es el producto de limpieza - como la lavandina o el detergente - más podemos confiar en que un equivalente genérico pueda cumplir la misma tarea por menor precio.

Compra al por mayor

En el afán de pagar menos es fácil tentarse en pensar a corto plazo mientras nos guiamos exclusivamente por el precio en la etiqueta. Un envase con menos cantidad puede parecer barata en virtud del precio, pero muy comúnmente el precio por litro en estos envases es mayor. Algo tan simple como utilizar la calculadora del teléfono celular y dividir el precio por los litros de cada uno nos puede ayudar a ahorrar grandes cantidades en el mediano y largo plazo.

Haz que tus trapos rindan

Algo que poco tenemos en cuenta en el momento de limpiar - y de gastar - son los trapos que usamos. Cuando no se cuidan apropiadamente se desgastan rápidamente y terminamos comprando nuevos demasiado seguido. Es por esto que a la hora de renovar los trapos conviene pagar un poco más y comprar paños de microfibra, ya que son mucho más resistentes y duraderos.

El producto adecuado para la tarea adecuada

Los productos multiuso son útiles pero terminan requiriendo más cantidad que los productos especializados, y antes de darnos cuenta ya gastamos varias botellas, especialmente con manchas tenaces o lugares difíciles de alcanzar. Es por esto que conviene tener varios productos especiales para sus respectivas tareas que rindan más a la larga en lugar de buscar soluciones milagrosas.

Medir, fraccionar y dosificar

Cuando buscamos reducir costos es muy común que compremos productos en bidones o botellas muy grandes. Es en estas circunstancias que el ahorro corre peligro; un derrame, un desliz, o usar productos de más puede deshacer en un instante todo ese trabajo duro. Reusar viejas botellas para hacer más manejables los productos nuevos nos salva de costosos accidentes y usar tazas medidoras nos permite ser eficientes en su uso.